Hacia 1610 Antonio Verdugo, encomendero, ordenó la construcción del templo doctrinero de Gachancipá al indígena Hernando Virues, dándole un plazo de (2) dos años para su construcción, lo cual según los historiadores han calculado la fecha de fundación cerca del año de 1612 cuando terminase la obra. Dio por fiador al carpintero Francisco de Reyna. La iglesia se construyó de 36 varas de largo y 8 ½ de ancho, paredes de una vara de grueso y cimientos de 1 ½ varas, con cuatro estribos en cada lado, de piedra, cal y ladrillo. El frontis con su atrio se edificó en el año de 1833 siendo cura el señor José María Plata. El templo parroquial conserva su autenticidad colonial con un altar mayor de estilo mudéjar. Está decorado con filigrana de oro incrustados en la madera, y ornado de figuras alegóricas y nichos, en los que se admiran imágenes pintadas por artistas famosos de aquella época. En 1873 se restauró por primera vez. La fachada de la iglesia consta de dos columnas, a lado y lado del portón, con sus respectivos capiteles.
De las joyas es notable el palio, bordado en ceda de oro, traído de Barcelona en 1914, gemelo de los de la iglesia de Sesquilé y la Cátedral de Bogotá. En 1873 se restauró por primera vez. Sitio de peregrinación bastante frecuentado, con obras del maestro Gregorio Vásquez de Arce y Ceballos.